martes, 21 de septiembre de 2010

¡Qué poco pintamos! por Antonio Alemany






  • Se ha producido lo que se presentía: ni siquiera el ministro Pepiño Blanco, se digna recibir al presidente de nuestra comunidad autónoma,  acompañado por los consellers  Vicens y Joana Barceló, y los manda a negociar el peliagudo e importantísimo tema de los descuentos aéreos con una secretaria de Estado. Tanto por la trascendencia objetiva de la cuestión como por la entidad representativa de Baleares del presidente autonómico, es una humillación esta arrogancia propia de chulo barato y no de un ministro del Gobierno.



  • ¿Alguien se imagina a Jordi Pujol  o a cualquier lehendakari vasco ninguneado por un ministro, encima de las características de Blanco?  Hubieran, en un rasgo de dignidad, cancelado el encuentro, seguido de una enérgica protesta al presidente del Gobierno por el desaire recibido. En cualquier caso, este desprecio de Blanco demuestra, desgraciadamente, lo poco que pintamos y la poca estima en que se nos tiene por parte del gobierno socialista.

  • Conviene recordar que cuando se produjo la ilegítima “okupación” del poder por parte del PSOE y las falanges catalano-ecoló-neocomunistas, uno de los argumentos utilizados por la prensa amiga era la pertinencia de una sintonía entre dos gobiernos del mismo signo y color, sintonía que aventuraba grandes logros y beneficios para Baleares. Toma del frasco Carrasco. Estamos a partir un piñón- y veremos- con una secretaria de Estado que carece de poder resolutivo. Pronto, de seguir con esta actitud ovina y felpudesca, nuestros íntimos serán los bedeles del ministerio.