domingo, 20 de mayo de 2012

Jorge Campos se explica: La Consellería podría hacer mucho más


ENTREVISTA MD | CREE QUE AL CONSELLER BOSCH "LE HA FALTADO VOLUNTAD POLÍTICA EN ESTE TEMA"

Jorge Campos: “La actitud de los catalanistas es fascismo, puro y duro”


Jorge Campos (Palma de Mallorca, 1975) ha sido, hasta hace poco, el gerente de la Fundación Balears Sostenible, entidad que ha abandonado al no estar de acuerdo con ciertas decisiones del ejecutivo autonómico. En la actualidad preside la Fundación Círculo Balear y, en una entrevista concedida a mallorcadiario.com, nos ha querido explicar su punto de vista respecto a una de las cuestiones que genera los más acalorados debates en la sociedad balear: la libre elección de lengua en los centros educativos.
Recientemente han denunciado ustedes “manipulación e intromisión” de directores y docentes en la libre de elección de lengua. ¿A que se refiere?
Con el inicio de la escolarización muchos padres han querido elegir la lengua en la que sus hijos recibirían las clases y lo que se han encontrado ha sido que desde los centros se les ha recomendado que mejor no lo hicieran en castellano porque si no, serían serían vistos como unos bichos raros y serían segregados.
Algunos padres se han encontrado con que no se les ha facilitado la hoja para la libre elección de
lengua porque les han dicho, sin ningún tipo de miramientos, que el centro no iba a cumplir la orden.
Y ya lo último ha sido que en algunos casos se ha recomendado a los padres que acudieran al centro para rellenar la hoja juntos. Esto supone una intromisión en la intimidad de las personas. Es una coacción.
Hoy, el noventa por ciento de los centros educativos están dirigidos por directivos nacionalistas que tienen su propia idea sobre hacer país.
¿Y qué dice la Consellería de Educación al respecto?
Callan, no responden. Sí que es cierto que reconocen que están en su derecho de elegir la lengua de escolarización para sus hijos pero ni hacen nada ni aclaran las dudas de los padres.
Según parece, les resulta un asunto muy complicado. Nosotros hemos tenido que crear una instancia para que los padres puedan rellenarla y hacer valer sus derechos.
En este caso se aúnan la dejadez de la Consellería y el independentismo imperante en los centros educativos.
¿Han recibido ustedes muchas quejas de los padres?
Puedo decirle que desde que se abrió el plazo de escolarización el pasado día 14, todos los días - mañana y tarde- hemos tenido que atender grupos de padres, de entre 10 y 40 cada uno, quejándose de lo mismo: que se ponen trabas tanto por parte de los docentes como de los directivos de los centros que les aseguran que no van a cumplir la normativa.
A estos, deben sumarse las reclamaciones recibidas por correo electrónico.
¿Cree usted que hay gente que no se queja o denuncia por miedo?
Indudablemente. Hay muchos padres que tienen miedo: si te dicen que tu hijo va a ser un bicho raro y que se le va a segregar porque mayoritariamente se va a hacer todo en catalán, es lógico que los padres desistan. Pero cada vez hay más padres que reclaman sus derechos en este ámbito y que incluso se organizan en grupos para ello.
Pero los que se quejan ¿son de aquí?
Mayoritariamente son mallorquines aunque también hay gente que ha venido de la Península e inmigrantes. Hay padres que se quejan de que sus hijos han sido siempre buenos estudiantes y que aquí, por no poder estudiar en una lengua que no sea la catalana y que desconocen, de pronto han bajado por completo su rendimiento escolar.
¿Cree usted que la lengua catalana está amenazada?
Eso es falso. Un estudio de la UNESCO de hace aproximadamente un año y medio, señalaba que el catalán es una de las lenguas más fuertes de Europa. Eso es un hecho objetivo.
Lo que sí está en peligro son las modalidades insulares: el mallorquín, el menorquín, el ibicenco y el formenterenc.
Las lenguas no están por encima de las personas, al contrario. Son un ente vivo que hay que cuidar. Las lenguas no son entes vivos: no sufren, ni sienten, ni tienen derechos. Los derechos los tienen las personas que utilizan las lenguas para lo único que existen: para comunicarse.
¿Y la lengua castellana?
Desde las instituciones está desamparada y el Partido Popular se hizo eco de ello. Ha sido un hecho excluyente, para acceder a según que puestos de trabajo, el saber, o no, catalán.
En educación, el 90% de las clases se da en catalán sin tener opción a elegir
Está claro que el castellano no está en peligro de extinción porque es una lengua fuerte pero sí que existe discriminación hacia los castellanohablantes en la administración publica y en el ámbito educativo. Donde al no poder escolarizar en castellano se niega la posibilidad, a aquellos que lo desean, de tener una competencia gramatical correcta en la lengua oficial del Estado
¿Qué debería suponer la libre elección de lengua?
El ejercicio práctico de un derecho que el Tribunal Supremo, con sus sentencias y la jurisprudencia creada, ha convertido en ley y que recoge también la Constitución.
El poder elegir no supone que se vaya a perder nada. El catalán está más fuerte que nunca y protegido con respecto a otras épocas en que fue perseguido. Se trata de defender los derechos de las personas y evitar actitudes fascistas que se escudan en términos como nación o lengua para estar por encima de la Ley.
Habla usted de fascismo. ¿Es fascista la postura de los catalanistas?
Es fascismo, puro y duro. Es propio del totalitarismo escolarizar en una lengua que no es la propia y eso no debería ocurrir.
Estamos en España, que tiene una lengua oficial y una cooficial. Además ¿por qué no se usan mallorquinismos en la lengua catalana? Ese es otro tema. Los propios defensores de la lengua catalana han reconocido multitud de términos propios de las islas que pueden ser usados y se obvian en favor del catalán.
Usted ha abandonado la Fundació Balears Sostenible ¿Cual ha sido la razón?
El PP prometió que habría elección de lengua a todos los niveles pero solo lo ha implantado entre los alumnos de 3 y 7 años. Eso para mí fue la puntilla.
Estamos en un período de crisis en el que es difícil trabajar pero uno se amolda a ello. En mi caso puedo decirle que ha habido un cúmulo de discrepancias en temas de planificación y estrategia pero no cumplir el programa prometido en esta materia ha sido la puntilla. Era un pilar fundamental que no se ha cumplido.
Ello no quiere decir que no mantenga buenas relaciones con la cúpula del PP.
Libre elección de lengua, imprimir libros en las diversas modalidades insulares… un poco utópico ¿no cree?
En lo referente a la libre elección de lengua, nosotros hemos hecho un informe en el que demostramos que no costaría un euro y en cuanto a imprimir textos en las diversas modalidades insulares considero que era una oportunidad de oro para fomentar el mundo editorial Balear. Ahora estamos pagando los libros a una editorial catalana.
Lo cierto es que Rafael Bosch no ha tenido voluntad política en este tema.
¿Qué le ha parecido la reforma de Bauzá en el tema de la lengua?
Me parece bien. El que el catalán se haya convertido en un mérito supone la eliminación de barreras para que los mejores puedan acceder a puestos de trabajo sin verse condicionados por un tema lingüístico.
Lo que no entiendo ni comparto es que se le siga exigiendo a los docentes. Si se hubiera hecho para todas las profesiones lo apoyaríamos sin fisuras. El hecho de que se exija a docentes implica que gente muy bien preparada que viene de fuera no pueda aportar sus conocimientos a la sociedad.
¿Y la manifestación a favor del catalán?
El derecho a manifestarse existe y me parece bien que se haga uso de él. Lo que no me parece bien es el uso que se ha hecho de esto en los centros educativos: en el interior de las aulas utilizando a menores o en los patios. El colgar banderas, que es ilegal… La Consellería debería haberse personado allí y hacer cumplir la ley.
Pero quienes llevaron a cabo esta iniciativa se niegan a hablar de banderas y se refieren a un símbolo que, de forma generalizada, representa la cultura catalana.
Ese argumento no se sostiene, además, todo ello se acompañó de un manifiesto político. Es una campaña anti mallorquina y que no tiene que estar representada por una bandera catalana. Todo esto es muy propio del pancatalanismo.
Si se solicita un examen para acreditar cierto nivel de catalán ¿debería solicitarse un examen para acreditar un determinado nivel de castellano?
Partamos de que no tendría que hacerse ningún examen respecto a estas dos lenguas. Uno sobreentiende que al vivir aquí se entienden y se hablan ambas pero si nos ponemos a pedir exámenes, pues claro que habría que hacerlo: si se obliga a estudiar en catalán, y solamente en catalán, pasará que el alumno no tendrá competencia gramatical con el castellano y sucederá lo que ya ha pasado en alguna ocasión: que cuando se ha querido salir fuera a estudiar se ha tenido que volver por el bajo conocimiento del castellano.
 ¿Cree usted que será posible llegar a un entendimiento en este tema?
Si quienes nos gobiernan no hacen caso a la mayoría de los ciudadanos será difícil. Los nacionalistas son un grupúsculo minoritario y quien manda son las urnas.
Los gobernantes deben aplicar en las instituciones lo que desean los ciudadanos y no los radicales, gente que muchas veces está fuera de la Constitución.